Tenemos nuestra cámara digital pronta para sacar fotos: La memoria está vacía, la batería llena.
Encendemos la cámara para sacar una fotografía: El camino mas sencillo es poner el control de modo de la cámara en MODO AUTOMÁTICO.
Todas las cámaras digitales de bolsillo y las intermedias tienen el modo AUTO, para dejar que la computadora dentro de la cámara se preocupe de ajustarse sola.
De esta forma nosotros solamente nos limitamos a apretar el botón para sacar la foto.
Suena demasiado fácil. Está bien, si recién comienzas, es una opción! Pero vamos a repasar algunas reglas y conceptos importantes del lenguaje fotográfico que debes asimilar y aplicar, antes de sacar la foto.
Vamos a sacar fotos con buen encuadre
¡Pobre gente! La que sale a veces sin cabeza, o hasta la cintura, pero sobre sus cabezas tienen mucho cielo. También a veces salen escoradas porque el horizonte está inclinado para un lado u otro.
El primer problema que enfrentaremos es el de hacer un correcto encuadre de la imagen, antes de plasmarla en una foto.
Para sacar la foto, usamos el visor (sea el de tipo mirilla, donde tenemos que poner el ojo contra la cámara, o los mas cómodos LCD o visores grandes). Por allí buscaremos un encuadre propicio.
Siempre paga con creces, detenernos a ver la imagen y -aunque le dediquemos un segundo- corregir el encuadre para que cumpla con algunas reglas básicas de la fotografía (¡Estas reglas son anteriores a la fotografía digital!).
Te dejo aquí tres reglas básicas, en su versión simplificada, para que puedas practicar con ellas. Verás que más sabe el zorro por viejo, que por zorro… ¡Y estas leyes se remontan a los inicios del arte fotográfico!
La regla del Horizonte
Se imaginan el visor dividido en tres partes iguales horizontales, e intentan darle al objetivo de nuestra fotografía el espacio correspondiente a dos tercios..
Es imprescindible mantener la cámara respetando un horizonte correcto (no inclinar la cámara digital en ángulo para la derecha o izquierda). ¡Que el horizonte sea horizontal!
La regla de los Tercios
Una regla bastante antigua, es no hacer que lo que queremos fotografiar esté en el CENTRO del visor.
Para ello podemos revisar lo que se llama la regla de los tercios:
Se imagina un tablero de tatetí sobre la imagen y se coloca lo que nos interesa fotografiar sobre cualquiera de los puntos en donde se cruzan las rayas del tablero, acomodándolo de tal forma de que cubra la mayor parte del tema que queremos fotografiar, siempre y cuando sea posible.
Esta regla de los tercios es sin duda una de las más comentadas y recalcadas en todos los cursos de fotografía.
Ley de la Mirada
Una variante interesante, sobre todo en retratos, personas y animales, es buscar que la persona esté mirando (si no está completamente de frente), hacia el lado donde dejamos más espacio. O sea, si la persona está ubicada en el primer tercio de las lineas verticales, que mire hacia el tercer tercio.
Una excepción a esto, o si la persona o animal está mirando de frente, es que mire directamente a la cámara (el gatito de arriba del todo).
Ninguna de estas reglas es inamovible. Pero la experiencia indica que al seguirlas lograremos fotografías más atractivas.
Estas reglas son tan generalizadas que muchas cámaras digitales incluyen la superposición del patrón de tablero de «tatetí» sobre el visor, para poder aplicar la regla de los tercios y del horizonte con esa ayuda visual.
Por supuesto, el sentido común aplica, junto a las reglas: Si están documentando un proceso o se encuentran ante un evento imprevisto, es perfectamente posible que el registro fotográfico sea más importante que ponerse a observar reglas.
En un caso así la fotografía adquiere valor por la historia que cuenta, el proceso que evidencia, y las reglas del lenguaje fotográfico pueden pasar a un segundo plano.